Hellmann Globetrotter: Anke Reinking y Henning Pottharst

Family

Henning, nuestro producto manager para Smart solutions, y Anke, nuestra responsable regional de recursos humanos para Europa del Este, han admirado Australia durante mucho tiempo por su cultura, su gente y su forma de vida en general. Cuando Anke estuvo de baja por maternidad y a Henning se le ofreció una oportunidad profesional en Melbourne, Sydney y Brisbane, la aprovecharon y se trasladaron a Australia.

Hola Anke y Henning, ¿qué los motivó para ir a Australia? 

Anke: Antes de nuestra mudanza, habíamos visitado Australia dos veces en vacaciones. Henning siempre soñó con vivir allí y ambos amamos el país durante nuestras visitas: la mentalidad de la gente, el estilo de vida y la naturaleza. Nuestra hija mayor también estaba en Australia en ese momento, por lo que fue una oportunidad perfecta para pasar tres meses juntos. Mi baja por maternidad coincidió perfectamente y para Henning, fue una excelente oportunidad profesional con Smart Solutions. Muchos factores se alinearon, haciendo que la decisión fuera fácil.

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Anke, Henning y sus dos hijas frente a la Ópera de Sídney


¿Ha sido fácil para vosotros integraros en el nuevo entorno laboral y en el nuevo país? 

Anke: Después de haber pasado vacaciones en Australia, ya estábamos familiarizados con el país, lo que facilitó la transición. Sin embargo, vivir y trabajar allí con un bebé fue diferente a unas vacaciones cortas. 

Henning: Profesionalmente fue beneficioso trabajar directamente con mis colegas australianos en lugar de coordinar todo desde Alemania a través de llamadas o correos electrónicos. Es mucho más fácil discutir los problemas en persona con un café. El equipo local fue amigable y acogedor, brindándonos consejos útiles para nuestro tiempo libre. Como ya conocía a mis colegas de reuniones anteriores, todo fue muy normal, no hubo un gran cambio. Desarrollamos y lanzamos productos juntos in-situ, con un gran apoyo del equipo en Alemania. 

Anke: La gente era muy abierta y servicial con las tareas cotidianas. Por ejemplo, cuando llevaba a mi pequeña hija Ida al supermercado, la gente era curiosa, hacía preguntas y era simplemente amigable. Australia es muy amigable con los niños, con excelentes parques, instalaciones limpias para cambiar pañales, amamantar y calentar alimentos, así como baños accesibles. Estas comodidades hicieron la vida mucho más fácil. Viajar también fue fácil debido a la infraestructura bien desarrollada y los campings equipados, esenciales en el clima soleado.

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Anke y Henning pasaron 3 meses en Australia


¿Qué extrañaron más de casa? 

Henning: Extrañamos más a la familia y los amigos. La diferencia horaria redujo la comunicación con nuestros contactos en Alemania, lo que fue más notable durante tres meses en comparación con vacaciones más cortas. Sin la mentalidad de vacaciones, se sentía más como la vida normal, solo con menos contacto con los seres queridos.

¿Qué les gustó más de vivir en Australia? 

Anke: El sol y el clima en general y, sobre todo, escapar del invierno alemán. Además, simplemente nos gusta la forma de ser de la gente en este país: las personas con las que tratamos, los colegas de trabajo de Henning y las personas que conocimos allí. Y no hay que olvidar la naturaleza. Australia tiene mucho que ofrecer: desde formaciones rocosas únicas y cascadas hasta lagos y playas interminables.

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Anke y Henning disfrutan de la vida playera australiana


¿Cómo era un día libre perfecto para ustedes? 

Henning: Un día libre perfecto consistía en pasar tiempo con la familia. Comenzábamos con un típico desayuno australiano (aguacate en tostada, huevos benedict) y un flat white, seguido de un viaje al campo o a la playa.

¿Hay algo más que les gustaría agregar antes de despedirnos? 

Anke: La hospitalidad de nuestros colegas realmente marcó una gran diferencia. Tener colegas maravillosos tanto en Australia como en Alemania hizo que nuestra experiencia fuera mucho más fluida. A pesar de los desafíos, especialmente con un niño, fue una experiencia enriquecedora que amplió nuestros horizontes. Podemos vernos haciendo algo similar de nuevo, tal vez no inmediatamente, pero en unos años, sabiendo qué podríamos hacer de manera diferente la próxima vez.

¡Muchas gracias por compartir su historia con nosotros!

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Henning en la oficina de Sydney

 

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